sábado, 16 de julio de 2016

Disconforme

Como alumna, de lo que he sentido falta en la universidad con la mayoría de la gente con la que he discutido, en diferentes países es la falta de plasticidad y experiencia espacial de la arquitectura en contra de la búsqueda de una imagen memorable y una buena publicidad para los proyectos.

En la arquitectura busco sensaciones, comprender mejor el mundo que me rodea e investigar en ello, profundizar en la sensaciones espaciales, dependiendo de la geometría, orientación, materialidad.. y su adecuación al uso personal, al placer que producen estos componentes en el interior  y cómo buena experimentación, descubrir y dejarme sorprenderme por los distintos ambientes y experiencias que en ellos se vive, sin olvidar la experiencia colectiva exterior que la obra en la que estés trabajando dará al emplazamiento en el que está.

Recuerdo el enunciado de un auditorio en proyectos de 4º, en el que eso no importaba, había que diseñar un programa, y desarrollar cualquier idea atractiva, en una zona con un puente totalmente fuera de escala a una distancia mínima y en una parcela totalmente desaprovechada, que obstucalizaba un recorrido público, mis profesores me dijeron que mi proyecto no era bueno por no encajar bien unos baños y no poner unas puertas al auditorio, disfrazándolo todo con una ¨buena¨ gráfica.
Y yo no puedo estar de acuerdo con que eso sea arquitectura, sin ni siquiera ubicar un edificio en el entorno, ponte a explicar los recorridos.

Todo queda en una imageneria en unos puntos a cumplir, sin un diseño reflexivo, que nada tiene que ver con la vida.
 los espacios se crean para vivirlos y despertar nuestra vida, la cuál se percibe por los sentidos, y su relación con lo existente le da identidad, compresión y en parte belleza.

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